El blockchain se refiere a una tecnología que tiene cerca de diez años de desarrollo, y que ha estado relacionada con el manejo de las criptomonedas, particularmente el bitcoin, adquiere relevancia a nivel internacional en el momento que la cotización del bitcoin alcanza niveles históricos de más de veinte mil dólares, lo que atrae la atención del público en general, empresas privadas, startups e instituciones del estado.
Conocida popularmente como «cadena de bloques», el blockchain es en esencia, una base de datos descentralizada, en donde la información está distribuida en toda la red.
El blockchain es una tecnología con un enorme potencial de innovación, se ha reconocido su valor más allá de la encriptación de las monedas digitales, lo que brinda posibilidades muy interesantes para su desarrollo, elemento que ha sido considerado incluso por gobiernos de países como Venezuela, país que ha desarrollado una criptomoneda propia llamada el «petro».
A raíz de la disponibilidad abierta del código del bitcoin y su popularidad, han surgido diversas monedas alternativas llamadas «altcoin», que son modificaciones o «forks» del código base del bitcoin, la principal aplicación del blockchain se fundamenta en la creación y evolución de las criptomonedas, entre las cuales destacan alternativas como Ethereum, Ripple o Bitcoin Cash, cada una de ellas con una visión de negocio particular. La aplicabilidad del blockchain es enorme.
El blockchain es una herramienta novedosa y extremadamente útil para que los programadores ofrezcan una gama totalmente nueva de soluciones, que trasciendan la concepción tradicional de la banca y de los gobiernos, los cuales son instituciones por naturaleza rígidas estructuralmente, lo cual ha generado reticencias, en particular ante legislaciones desfasadas en el tiempo que no contemplan métodos de actuación ante una propuesta descentralizada y que proporciona al usuario la posibilidad de manejar de manera anónima las transacciones. Este último punto ha causado polémica entre los gobiernos, quienes han argumentado posibles actividades de lavado de dinero y evasión de impuestos como justificación para regular el mercado de las criptomonedas, mientras que, por otro lado, hay estados que están adecuando su marco jurídico para establecer medios de actuación que permitan ejercer control sobre las criptomonedas y el blockchain.
Gran parte de la utilidad del blockchain se debe a los estándares de seguridad que proporciona, son prácticamente inviolables, las transacciones registradas bajo esta plataforma, son una fuente de garantía para los usuarios, en especial para protección de la privacidad de sus datos.
El blockchain acompaña una era de innovaciones en conjunto con el big data, la realidad aumentada, realidad virtual y la inteligencia artificial. Un conjunto de tecnologías desarrolladas para darle comodidad a nuestras vidas.
El Perú tiene muchas posibilidades de desarrollo e innovación gracias a esta tecnología, con una penetración celular del 110% según datos del Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel) para las ciudades de Lima, Arequipa y Tacna. Las propuestas de masificación del blockchain a través del Smartphone tienen un enorme potencial en el Perú.
A nivel nacional, se espera que la penetración de internet móvil entre el 2016 y 2021, pase de 43,1% a 67,8% según un informe de la consultora PwC, lo que brinda un mercado potencial enorme para las startups que desarrollen negocios relacionados con la tecnología blockchain, como plataformas de pago y micro financiamiento, en especial destinadas al público millenial, el cual manifiesta estadísticas de penetración Smartphone del 82% según el Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones.
Las aplicaciones comerciales del Blockchain, son prometedoras, la seguridad que brindan hacia las transacciones bancarias, permiten agilizar los procesos de financiamiento que permiten a las empresas tradicionales realizar actividades de importación y exportación, e incorporar nuevos actores en el ecosistema exportador peruano, en especial en el sector de pequeñas empresas, que ayudarían a diversificar aún más las exportaciones del país, generando crecimiento económico y bienestar. Por otra parte, las cadenas de bloques, pueden blindar los procesos logísticos de embarques y nacionalización reduciendo la posibilidad de contrabando y evasión de impuestos, lo que beneficia al fisco nacional.
Perú alcanzó un intercambio comercial durante el 2017 de 65 mil millones de dólares de acuerdo al Ministerio de Comercio Exterior y Turismo, impulsados por la pesca y los hidrocarburos, la adopción de la tecnología de blockchain en una plataforma estable y sobretodo, escalable, facilitaría las operaciones de comercio internacional, el cual aun en esta era de innovaciones tecnológicas, depende en gran medida del intercambio de documentos en papel.
Una propuesta adicional de desarrollo de la aplicabilidad de la tecnología blockchain, se fundamenta en procesos de auditoría gubernamental, este tipo de prácticas, además de tener campo de desarrollo en el área electoral, optimizando los procesos de elección popular evitando con ello, la probabilidad de fraudes electorales. El blockchain enfocado de esta manera, fortalece la gestión de los recursos aportados por el contribuyente peruano a través de sus impuestos, generando mayor eficiencia en la gestión de gobierno.
*Edinson Carranza, Joven emprendedor peruano, programador, informático de 23 años, apasionado por la tecnología, blockchain y el desarrollo de innovaciones que, de la mano con la tecnología mejoren nuestra calidad de vida.