Una nueva denuncia salió a la luz y se trata de la falsificación de documentos que controlaban la reincorporación de trabajadores públicos a determinados puestos, con el fin de despedirlos.
Este delito, fue llevado a cabo por Julio Garro, quién según su acusador (Ricardo Bradley) habría abusado de su autoridad y violado los derechos de los trabajadores públicos en pleno apogeo de la pandemia, para dejarlos en la calle y traer un egoísta beneficio propio.
Este suceso habría tenido inicios desde marzo, pero la municipalidad nunca se presentó ante ninguna de las audiencias, así que, las autoridades competentes se vieron obligadas a citarlos para una conciliación de carácter obligatorio.
El Tribunal del Trabajo se vio obligado a dictaminar que la comuna debía reincorporar a todos los trabajadores y entregarles su sueldo correspondiente, mas esto no ocurrió como se esperaba, pues la Municipalidad apeló al Juzgado Contencioso Administrativo, el cuál dio favor a la misma, debido a que habían falsificado el decreto municipal 460/20.
Ante esto, Bradley continuó sus acusaciones, alegando que la Comuna habría alteró los decretos para su favor y los convirtió en un verdadero «Bochorno».